Pero sinceramente, y volviendo al tema viajero, yo prefiero volar con las páginas escritas por un polaco ilustre al que rindo un pequeño pero enfervorecido homenaje desde su tierra natal (si es que aceptamos el suelo del aeropuerto como tal): Ryszard Kapuscinski. Amén.
Voy a ver si mi pericia con el teclado del móvil me permite subir algunos extractos a modo de pequeños aperitivos de su libro "El Imperio",
que os recomiendo sin reservas. Ojalá os tiente su lectura...
(Espero no estar quebrantando leyes de propiedad intelectual. Y si es así, que alguien me avise)
Bueno, os recomiendo cualquiera de los libros escritos por él, aunque para no iniciados elegiría la perla entre las perlas: Ébano.
Para terminar esta entrada os introduzco brevemente mi próxima lectura (ya estoy insalivando) que abordaré en cuanto nos dejen acomodarnos en los asientos del vuelo de LOT que nos llevará esta noche a Tbilisi... (siempre que el sueño, amante esquivo por más que deseado, no me reclame) y que trata más concretamente sobre el objetivo de este viaje: "Heridas del viento. Crónicas armenias con manchas de jugo de granada", de Virginia Mendoza (no tengo el placer... todavía)
No me negaréis que el título sea sugerente... En próximas entradas os contaré si las expectativas de cumplen.
Salud!
(Me encantaría recibir recomendaciones de otros libros que os hayan gustado 😉)
Yo estoy leyendo una novela,"Pecado",ambientada en la postguerra civil...me está encantando.
ResponderEliminarMmmm Pecado suena bien 😉
ResponderEliminarO principiño traduccion gallega
ResponderEliminar😘welcome, Caroline!
EliminarQué risa, sería divertido compararlo con mi Principecinho portugués 😁😁😁
Yo también he leído el Pentateuco y me costó bastante. Lo dejaba por enfado, otras veces por aburrimiento, otras me reía bastante, y en algunas ocasiones era muy triste. Al final lo terminé, con el sentimiento de misión cumplida :D
ResponderEliminar:) parece que se amplía el club de los elegidos... Jejejej
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